El recuerdo despierta (05 marzo 2023)

El recuerdo despierta. Agua dormida

que de repente surca como un rayo,

o como el trote agreste de un caballo,

el verdinoso lecho de la vida.

Desnuda la razón, de amor herida,

en la insolencia azul del mes de mayo,

la memoria me aborda. Aunque batallo,

ya nada puede hacer mi alma vencida.

Si me habla el corazón, yo siempre fallo:

de nada sirve arnés, freno, ni brida.

EL DEMONIO EN LA CALLE Y EL BOSQUE OSCURO (Enero 2019)

EL DEMONIO EN LA CALLE Y EL BOSQUE OSCURO (Enero 2019) – Elegía a la desgraciada muerte de la profesora asesinada –

Esta es una historia cruel

de juventud machacada,

de secretos en las hojas

del bosque en la madrugada,

de insectos en la neblina

donde la vista no alcanza,

y en las pupilas del lobo,

acechos que no descansan.

Aquella tarde de viento

cuando Diciembre mostraba

algunos rizos de sol

sobre el blanco de las casas,

la calle era un sigilo

enconado en la ventana

desde donde un mal podrido

sin corazón, la miraba.

Ella, casi ajena al aire,

y casi recién llegada,

sentía el mundo por abrir

su ilusión aún temprana,

sin notar la sombra negra

que rondaba tras su espalda,

como las gélidas huellas

que despliegan los fantasmas.

Cuando con paso tranquilo,

en el tupido silencio

su inocencia caminaba

por la soledad del pueblo,

sumido en calladas siestas,

un demonio carnicero

con las zarpas de ponzoña,

de pronto surgió del viento,

y desalmado arrancó,

de raíz, sus claros sueños;

las llaves de puertas nuevas

y el mapa de los senderos

que el fulgor de su entusiasmo

había trazado en cientos

de sitios imaginados,

cayeron ante el violento

golpe de hiel desatada

desde el fondo del infierno.

Un halo turbio de barro

le atravesó todo el cuerpo,

y aunque intentó con sus pies

soltarse del diablo enfermo,

sus pezuñas eran fuertes,

y aún más mortales sus cuernos.

Y no pudo ser laurel,

ni cisne, ni flor, ni ciervo,

ni la ninfa que los dioses

salvan de monstruos infectos.

En el bosque, entre los juncos,

el demonio se reía

mientras ensuciaba impávido

el rumor del agua limpia,

dejando en brusca tiniebla

una ingravidez dormida

que ya nunca haría cuentas

con los meses, ni los días

por tachar al almanaque

florecido de la vida,

porque, cargado de noche

negra, estancada, y maldita,

el diablo había cumplido

su sentencia agria y fija

de sesgar en un instante

una esperanza sencilla,

con su soberbia de muerte

en la sinrazón escrita.

¡El mal fario te mereces,

las rejas más definidas,

una barrera de sangre

para tu hambre escondida,

la guerra de las mujeres

como una nube de avispas,

una maldición perenne

a tu espalda bien cosida!

¡En mala hora miraste

hacia donde no debías,

para incrustar tu penumbra

en la piel de su sonrisa!

LA MUCHACHA ALEGRE Y EL DIABLO OCULTO (02 MARZO 2023)

LA MUCHACHA ALEGRE Y EL DIABLO OCULTO (02 marzo 2023)

ESTRIBILLO:

¡Qué pena de muchacha alegre,

que se marchó para volar!

¡Ay, qué dolor de rama verde,

que apenas comenzó a brotar!

No pudo terminar la senda, ay,

que se rompió por la mitad,

y en el silencio estaba el aula, ay,

y el entusiasmo de enseñar.

Estrofa 1:

Esta es la dura y triste historia

de una joven que empezaba

su camino a recorrer.

Nunca, nunca pudo imaginarse

que su libertad primera

se iba a quebrar de una vez.

ESTRIBILLO:

¡Qué pena de muchacha alegre,

que se marchó para volar!

¡Ay, qué dolor de rama verde,

que apenas comenzó a brotar!

No pudo terminar la senda, ay,

que se rompió por la mitad,

y en el silencio está la tiza, ay,

y el entusiasmo de enseñar.

Estrofa 2:

Ese, ese día por la calle

el diablo la espiaba

tras invisible disfraz.

De pronto, le arrebató por sorpresa

el sueño de vida nueva

que comenzaba a estrenar.

ESTRIBILLO:

¡Qué pena de muchacha alegre,

que se marchó para volar!

¡Ay, qué dolor de rama verde,

que apenas comenzó a brotar!

No pudo terminar la senda, ay,

que se rompió por la mitad,

y en el silencio está la tiza, ay,

y el entusiasmo de enseñar.

Estrofa 3:

El diablo con su fuerza de demonio

la atenazó por la espalda

y al bosque se la llevó

donde los árboles de la noche

cerraban el horizonte

gimiendo negro dolor.

ESTRIBILLO:

¡Qué pena de muchacha alegre,

que se marchó para volar!

¡Ay, qué dolor de rama verde,

que apenas comenzó a brotar!

No pudo terminar la senda, ay,

que se rompió por la mitad,

y en el silencio está la tiza, ay,

y el entusiasmo de enseñar.

AQUELLA NOCHE ESTRELLADA (22 Febrero 2023)

AQUELLA NOCHE ESTRELLADA (22 Febrero 2023)

Las voces de luciérnagas de oro

giran y giran en el fondo oscuro,

y claman en su magia el metal puro

que canta su festejo, como un coro

donde la luz rellena su tesoro

en el marco nocturno. Y de seguro

que dibuja cordura en ese muro

en que te arrebataron el decoro.

Nunca supiste lo que yo te auguro

desde el amplio tapiz de tus estrellas:

tú  tendrías aliento en el futuro

en países y años muy lejanos

con  esas noches tan tuyas y bellas,

y crepúsculos vivos en las manos.

DESDE TU NOMBRE, FANTASÍA (16 Enero 2023)

DESDE TU NOMBRE, FANTASÍA (16 enero 2023)

Ave del arcoíris,

que estrenas cada día un tono nuevo,

ciclón alado,

brillante conclusión de las estrellas

en su suave temblor de medianoche.

Sueño de agua limpia,

espuma contumaz de duermevela,

guiño ligero,

graciosa levedad en su misterio

de caminos lejanos y borrosos.

Gruta de la emoción,

gruesas paredes de historias ocultas,

granito intenso,

cuentos que se quedaron incrustados

en una geología de recuerdos.

Así te llamo yo,

así requiero yo de tu presencia,

canto tus cosas,

y te defino mientras me defines

en tu espeso infinito de ironía.

DESDE TU NOMBRE, FANTASÍA 2. EN CARNAVAL

Teatro de las esquinas,

gracejo de la calle iluminada,

mi fantasía,

desde siempre abrazada a los colores,

se hace eco del juego y de la máscara.

Chispas de olas antiguas,

yodo que vibra al sol de los milenios:

en los vestidos

se va bordando el mar, como en un cesto,

racimos nacarados de palabras.

Sencillas libertades,

días para el ensueño y el relato,

y por la noche,

la espontánea fluidez de la emoción

que se entrega en batiente algarabía.

Y así te llamo yo,

así voy envolviéndome en las plumas

del ave plena

de cromáticas vidas estelares,

que se revela en la imaginación.

EN LA OLA ENVOLVENTE (01 ENERO 2023)

EN LA OLA ENVOLVENTE (01 Enero 2023)

¡Qué estúpida! ¡Qué loca! ¡Qué valiente!

¡Qué arrojada! ¡Qué poco previsora!

¡Qué romántica y torpe! ¡Qué ceguera

me dejó obnubilada la razón!

¡Qué alma de algodón sucio y raído

para el arrastre de los sumideros!

¡Qué inconsciencia! ¡Qué perdición absurda!

¡Qué rendición total en la batalla!

¡Qué tierna! ¡Qué magnífica! ¡Qué tonta!

¡Qué ingenuidad más dulce en las mentiras!

¡Qué distancia más larga en el camino

hacia el consuelo rancio de los necios!

¡Qué imbécil! ¡Qué voraz! ¡Qué desatino

al jugar con la apuesta a contratiempo!

¡Qué empeño gratuito y obstinado

en vadear los ríos imposibles!

¡Qué gruesa soledad sirvió de apoyo

a repentinas ráfagas azules!

¡Qué carencia en pétreos escalones

te empujó al vendaval! ¡Qué pobre espiga!

¡Qué idiota! ¡Qué egoísta! ¡Qué pequeña!

Quizás, ¡qué grande!

No sé …

¡Qué libre en esa densa dependencia

que acristala la sombra del olvido!

¡Qué intensamente rico el albedrío

al sol verde y sonoro de los campos!

¡Qué imbécil! ¡Qué rebelde! ¡Qué insensata!

¡Qué simple! ¡Qué compleja! ¡Qué cercana

la fe de los enigmas de la tierra!

(Todo eso fui.

Lo sigo siendo.)

Y al fin,

sencillamente, sólo, ¡cuánta vida!

¡AY, LOS DESEOS! (22 Diciembre 2022)

¡AY, LOS DESEOS!

¡Ay, los deseos!

Redondos, en plural.

Porque en el singular es otra cosa…

Son los faroles hondos

que proyectan auroras consentidas

en corazones hartos y cansados

de repetir,

tantas y tantas veces,

la amargura de Sísifo en la noche.

Arrancan rayo a rayo

las enconadas sombras

de aquellas frustraciones que acabaron

posándose en el fondo

de almas exhaustas

perdidas, tal vez rotas,

con la tarde cayendo en el camino.

¡Ay, los deseos!

Redondos, en plural.

Los hay que nacen en ríos podridos,

y ocultan su vil rastro de gusanos

en el oscuro cieno

de todas las envidias.

Pero aquellos que vienen de la masa

blanca, esponjosa y limpia

del pan diario,

ofrecen sus andamios luminosos

para auparnos del barro en las caídas,

y fluyen por las calles sin cuchillos

ni aristas de veneno.

Tan solo asumen voluntades dulces,

un nuevo calendario en la cocina,

y llenan los espejos

de lámparas y luces de diamante,

las que soñamos siempre en los palacios

de la niñez,

en los baúles de la fantasía.

¡Ay, los deseos!

Redondos, en plural.

Porque en el singular es otra cosa…